Hoy, 27 de julio, se celebra el SysAdmin Day, un día para reconocer la labor de los Administradores de Sistemas; figura muy importante dentro de las empresas. Algo curioso que noté muchas veces es que sobre estos individudos recaen una serie de mitos, ya que en muchas empresas aún sigue siendo un ser casi mitológico que pasa la mayor parte del tiempo en el cuarto frío junto a los servidores; detrás de pantallas oscuras con letras blancas, lo cual les da cierta aura mística.
Así que basándome en cinco mitos que escuché en varias oportunidades sobre los SysAdmin, decidí hablar con varios amigos que vienen desarrollando este rol en sus respectivas empresas para intentar determinar las verdades que giran alrededor de esta raza de profesionales y así intentar acercarnos un poco más a su entendimiento.
Verdad #1: Un SysAdmin lo sabe todo
Una de las primeras preguntas que hice sobre algunos de los mitos que rodean a los SysAdmin estuvo relacionada a cuáles son los conocimientos que debería tener un simple mortal para tener un buen desempeño en esta función. Luego de la cara de desconcierto, empezaron a enumerarme una larga lista de tecnologías y temas donde los más recurrentes fueron: lógica de programación, bases de datos, redes, sistemas operativos y seguridad informática.
Si bien no se trata de saberlo todo, claramente se requiere de aptitudes muy particulares para desarrollar este rol; fundamental en todas las empresas.
Verdad #2: El SysAdmin está en vía de extensión
A riesgo de ser linchado, les pregunté cómo veían su carrera a futuro, ya que muchas veces escuché (aunque no comparto) que con la migración de infraestructuras a la nube y la moda de tener todo como servicio o tercerizado, el SysAdmin ya no sería relevante.
En general hubo consenso en que la posición cambió y que lo seguirá haciendo en los próximos años; pero sin lugar a dudas la visión integradora entre el negocio y los requerimientos de IT van a seguir pasando por la figura de este personaje. Por lo tanto, si bien las tecnologías pueden ir cambiando, un buen administrador de sistemas seguirá cumpliendo un rol importante.
Verdad #3: Un SysAdmin no puede dormir tranquilo
¿Recibir una llamada a mitad de la noche porque se rompieron los canales de comunicación durante el proceso de consolidación de la base de datos transaccional? Este podría ser uno de los tantos escenarios a los cuales pueden verse enfrentados los SysAdmin a diario; incluso peores. ¿Les quita el sueño?, todos coinciden en que no mucho y que aprovechan para descansar cuando es posible. Incluso saben que está dentro de las posibilidades tener que interrumpir una fiesta para atender un incidente.
Verdad #4: Los SysAdmin tienen su propia secta para dominar el mundo
Partamos de la base de que los Adminstradores de Sistemas tienen acceso a toda la información en la empresa. En este sentido, pueden regular el ancho de banda al que puedes acceder, saber por dónde navegas, y algunos más fascistas podrían incluso prender la cámara web de la laptop (aunque todos con los que hablé coincidieron en que nunca lo hicieron).
Todo lo anterior no implica que se estén organizando para dominar al mundo, pero si llega a aparecer algún genio malvado podrían intentarlo sin problemas. Por esto y muchas otras razones más, es mejor tenerlos de amigos.
Verdad #5: El SysAdmin es el ser más cercano a Buda
Algo que admiro de todos los SysAdmin es su capacidad para lidiar con todo tipo de usuarios (creo que todos sabemos las clases de usuarios que nos podemos encontrar en una empresa). Si bien algunos reconocieron que la paciencia es una virtud del SysAdmin, en muchos casos la fueron desarrollando, y varios otros comentaron que usan técnicas como jugar al Counter Strike para liberar algo de tensiones. Así que, como recomendación: seamos buenos usuarios.
Así que, siguiendo el espíritu de esta fecha, hoy es el mejor día para reconocer a estos heroicos hombres y mujeres conocidos en el mundo como SysAdmin o Administradores de Sistemas que, bajo la lluvia o el sol, evitan los desastres, mantienen la seguridad informática y apagan los incendios tecnológicos por todas partes en la empresa.