HBO, uno de los canales de televisión por cable más populares de Estados Unidos y Latinoamérica, fue víctima de un ciberataque. Los cibercriminales se hicieron con información altamente valiosa, y si bien la compañía no confirmó cuál, al parecer fueron episodios inéditos de las series Ballers y Room 104, y un guion del próximo episodio de Game of Thrones, el cuarto de la séptima temporada que tiene a todo el mundo en vilo.
En un comunicado que reprodujo Entertainment Weekly, la compañía dijo: "Inmediatamente empezamos a investigar el incidente y estamos trabajando con las autoridades y con firmas de ciberseguridad externas".
Según este medio, los cibercriminales aseguran haber robado 1,5 terabytes de información de HBO. Los primeros en enterarse fueron los periodistas que ayer recibieron un correo anónimo, que rezaba (traducción libre al español, respetando la sintaxis original en inglés):
"Hola a toda la humanidad. La mayor filtración de la era del ciberespacio está ocurriendo. ¿Cuál es su nombre? Oh me olvidaba de decirlo. Es HBO y Game of Thrones……!!!!!! Tienen suerte de ser los primeros pioneros en atestiguar y descargar la filtración. Disfrútenlo y difundan la palabra. Quien difunda bien, tendremos una entrevista con él. HBO caerá".
Como suele suceder en estos casos, no está comprobado que los atacantes tengan efectivamente la información que afirman tener, y hasta ahora no se ha filtrado ningún capítulo de Game of Thrones.
Muchas veces, lo que persiguen estos ataques es darle fama a los grupos responsables, demostrar las falencias de seguridad de las grandes compañías o incluso intentar venderles servicios de seguridad.
Eso es lo que hizo, por ejemplo, el grupo OurMine al comprometer las cuentas de Mark Zuckerberg de Facebook, Sundar Pichai de Google y John Hanke de Niantic Labs.
Y si nos enfocamos en el robo y posterior filtración de capítulos de series, no podemos dejar de mencionar el caso de Orange Is The New Black. En abril, un cibercriminal afirmó que publicaría la nueva temporada si Netflix no pagaba un rescate, cuyo monto no se dio a conocer. El pago no se efectuó y los episodios aparecieron en Pirate Bay seis semanas antes del lanzamiento oficial.
Esta persona, bajo el apodo “thedarkoverlord”, también afirmó haber robado otros shows de cadenas como Fox, National Geographic y ABC.
También estuvo el caso más reciente de Disney, que recibió la advertencia de que algunas partes de una película inédita serían publicadas si no accedían a pagar un rescate en bitcoins.
Como analizaba Stephen Cobb, investigador de ESET, Hollywood se ha convertido en un blanco más del cibercrimen, por lo que las productoras y todos sus proveedores deberían comenzar a considerar formas de proteger mejor su propiedad intelectual.
HBO, Netflix y Disney tienen otro punto en común además de ser productoras de grandes éxitos: son blanco de cibercriminales. Por lo tanto, estas compañías y otras del mismo rubro necesitan verificar que tienen compromisos obligatorios de parte de todas las entidades que participan en sus proyectos de propiedad intelectual digital, y deben auditar esos procesos.
Es decir, deben proteger sus series y películas en todo el proceso de planificación, producción y distribución; y no solo en sus oficinas, sino en cualquier otro lugar al que esos activos viajen durante el proceso.