Hace 16 años nació macOS, llamado en ese entonces Mac OS X. Por 129 dólares, ese nuevo sistema operativo prometía una experiencia estable, de código abierto y basada en Unix. A medida que los años pasaron y con ellos pasó la novedad de esta versión, su seguridad se convirtió en una de sus características más comentadas, convenciendo a muchos usuarios de Apple de que sus máquinas son prácticamente invencibles.
El concepto de seguridad al 100% no existe
Sin embargo, los tiempos han cambiado y el malware también, de manera que fue añadiendo gradualmente a macOS en su lista de objetivos. Solo el año pasado, ransomware, amenazas que roban información y backdoors han logrado infectar a miles de usuarios de lo que alguna vez pareció un sistema impenetrable.
En marzo de 2016, el malware OSX/KeRanger apareció en el radar tras haberse infiltrado en una versión del cliente de BitTorrent legítimo llamado Transmission. Firmado con un certificado de desarrollador legítimo, este ransomware criptográfico plenamente funcional apuntaba a blancos fáciles: víctimas que no tenían instalada una solución de seguridad. A pesar de que fue descubierto en cuestión de horas, KeRanger pudo infectar a miles de usuarios de Mac.
En febrero de 2017 advertimos otro tipo de ransomware detectado como OSX/Filecoder.E, que se propagaba a través de sitios de distribución de BitTorrent haciéndose pasar por "Patcher", una aplicación usada para piratear software popular. Si la víctima descarga y ejecuta el archivo zip infectado, solo basta hacer un clic para que los archivos en el sistema se cifren.
macos es cada vez más interesante para los creadores de malware
Después llegó OSX/Komplex, que pertenecía a un grupo de malware diferente. Era una de las herramientas maliciosas usadas por el grupo cibercriminal Sednit, también conocido como Sofacy y otros nombres. En tan solo tres etapas, lograba distraer a la víctima y liberar un ejecutable que garantizaba la ejecución con cada inicio del sistema, y finalmente abría un canal de comunicación con los atacantes, dándoles acceso total a la computadora comprometida.
Estos casos prueban que sin importar qué sistema operativo elige un usuario, el concepto de seguridad al 100% simplemente no existe, y también que macOS es cada vez más interesante para los creadores de malware.
A pesar de que no existen tantos códigos maliciosos para macOS como para Windows, sabemos que los ciberdelincuentes están trabajando arduamente para encontrar nuevas víctimas. Por eso, sé precavido y considera instalar una solución de seguridad, prestar atención a las actualizaciones y aplicar siempre el sentido común para mantenerte alejado de amenazas y engaños.
Si quieres saber más sobre malware para Mac a lo largo de los años, no te pierdas esta infografía que resume su historia: