Si en el anterior episodio de Mr. Robot analizamos un buen puñado de ejemplos en los que los protagonistas utilizaban técnicas y herramientas de hacking, en este capítulo todo es mucho más sosegado en ese aspecto. No nos equivoquemos, se trata de un capítulo muy intenso en lo narrativo con una gran sorpresa al final, pero la parte técnica queda relegada a un segundo plano.
Sin embargo, esto no significa que no tengamos nada que comentar, así que empecemos por…
Un apretón de manos
El título del capítulo (h4ndshake.sme) y una de las referencias que Elliot usa durante las primeras escenas habla de handshake (apretón de manos). Esto hace alusión al Handshaking o, según podemos leer en la Wikipedia, “proceso automatizado de negociación que establece de forma dinámica los parámetros de un canal de comunicaciones establecido entre dos entidades antes de que comience la comunicación normal por el canal. De ello se desprende la creación física del canal y precede a la transferencia de información normal”.
Hablando en claro, se trataría de un proceso previo a la comunicación real entre dos dispositivos, necesario para establecer una conexión. Elliot hace referencia a este proceso para referirse al restablecimiento de comunicaciones entre él y el espectador, ¿o más bien con su alter ego, Mr. Robot? Dejaremos que seáis vosotros quienes decidáis ;)
Recuperando el servidor
La única escena en la que vemos a Elliot frente a un ordenador en todo el episodio es cuando Ray le pide que termine el trabajo asociado con la migración del sitio web donde se alojaba su (oscuro) negocio online. No es que utilice ninguna herramienta o técnica de hacking, puesto que se trata de una tarea de administración, pero vemos cómo se conecta por SSH al servidor y luego utiliza Nano, el conocido editor de textos en Linux, para editar la configuración del servidor y reiniciarlo.
Aparentemente no hay nada de conflictivo en esta escena, pero ya sabemos que a los informáticos nos gusta sacar punta a casi todo. La elección de Nano por parte de Elliot es, cuanto menos, polémica, debido a que cada usuario tiene sus preferencias y hay quien prefiere utilizar Vi como editor de textos o incluso Emacs, principalmente por la inclusión de características avanzadas de las que carece Nano y que alguien con los conocimientos de Elliot aprovecharía bien.
Controlando las cámaras de seguridad
Nuestra investigadora del FBI favorita y amante de los dulces con palito (piruletas, chupetines o como los llamen en tu país) “Dom” DiPierro, nos dejó a Angela en una situación comprometida en el episodio anterior. Avanzaremos que Angela consigue librarse temporalmente de las preguntas de Dominique pero no de sus sospechas.
Como buena agente que es, Dom intenta obtener el registro de las cámaras de vigilancia del piso donde el FBI tiene las oficinas temporales, para así pillar a Angela con las manos en la masa. Sin embargo, se encuentra con que todo el material grabado ha sido eliminado, muy probablemente por Darlene una vez ha conseguido acceso a la red gracias a la femtocelda colocada durante el episodio anterior.
Si bien este borrado remoto es técnicamente posible, el tiempo necesario dista mucho del mostrado en el episodio, a menos que Darlene tuviera mucha información de antemano, como por ejemplo, el sistema de vigilancia usado y posibles vulnerabilidades a explotar o nombres de usuario y contraseñas de alguien con permisos para editar esos videos. Aun así, el tiempo para conseguir borrar acceder a esos vídeos y eliminarlos debería ser más largo que unos pocos minutos. Aunque, quién sabe, tal vez tuviera un script ya preparado para tal efecto y no nos lo mostró.
Easter eggs y conclusiones
En este episodio solo hemos detectado un easter egg oculto y es durante la pantalla de configuración del servidor que Elliot realiza para migrar el sitio web de Ray. Ahí aparece una IP que nos redirige a una web donde se nos permite concertar una visita. No vamos a decir nada más puesto que desvelaríamos la sorpresa final del capítulo, así que lo dejamos para que lo descubráis por vosotros mismos.
También se comenta en un momento del episodio que se está fomentando el uso del E-Coin, una divisa criptográfica que sería la respuesta de E-Corp basada en Bitcoin ante los problemas que tienen sus clientes para retirar dinero en efectivo.
En definitiva, un capítulo que, si bien no profundiza demasiado en los aspectos técnicos, es muy intenso argumentalmente y que nos dejará bastante sorprendidos al final, al menos a aquellos que no han leído ninguna de las teorías que hace semanas pululan por la red…
