Para algunos niños, las vacaciones no son solo ese período de descanso sin tarea ni levantarse temprano, sino también la oportunidad de alejarse de quienes los hostigan en la escuela y tanto offline como en redes sociales (los bullies).
Desafortunadamente, no todos los padres pueden distinguir las dificultades comunes de niños y preadolescentes de las señales de alerta ante comportamientos abusivos. El pasado 17 de junio celebramos el Stop Cyberbullying Day (Día Internacional contra el Ciberbullying) y para contribuir a su misión, preparamos una lista de indicadores que pueden ayudar a los padres a reconocer si sus hijos están siendo acosados.
1. Respuestas nerviosas y cambios de humor
Los cambios de humor frecuentes no implican necesariamente que a tu hijo lo molestan sus compañeros. Sin embargo, si están acompañados de reacciones defensivas y nerviosas a preguntas comunes, especialmente tras desconectarse del mundo digital, es hora de preguntarte si está teniendo algún problema.
Los adultos no deberían conformarse con respuestas como "bien", ya que no siempre significan que todo está bien. A veces tienes que excavar más hondo para descubrir cómo se siente realmente tu hijo respecto a su experiencia online.
2. Cuenta de redes sociales eliminada
Si el niño abandona repentinamente una red social que solía ser de sus favoritas, presta atención. En una era en que los menores pasan mucho de su tiempo en línea y usando redes sociales para divertirse y comunicarse, borrar una cuenta podría ser una señal de que algo anda mal.
Las herramientas de control parental, instaladas en el dispositivo de un menor, les permiten a los adultos tener un panorama de qué aplicaciones prefieren y usan con más frecuencia.
3. Alejamiento de amigos y familiares
Es natural que los adolescentes traten de volverse más independientes de sus padres y por lo tanto dediquen tiempo a formar su propia red de amistades. Pero si se distancian de ella, se esconden del mundo exterior en sus habitaciones y evitan el contacto a través de redes sociales o el uso de sus dispositivos móviles, puede que algo ande mal.
4. Cambios físicos drásticos
¿Tu hijo bajó de peso repentinamente o perdió el apetito? ¿Tiene problemas para dormir durante la noche y luce cansado durante el día? De nuevo, esto podría ser una señal de varias cosas, no necesariamente un caso de ciberbullying, pero debemos señalar que, combinado con otros de los puntos anteriores, hay chances de que se trate de acoso (cibernético o no).
5. Fingir estar enfermo para evitar ir a la escuela
"No me siento bien", "me duele la panza", "¿puedo faltar a la escuela hoy?". Prácticamente todos los niños usan estas excusas de vez en cuando. Claro que a veces es real el malestar, pero es común que traten de evitar los nervios y el estrés que provoca un examen para el que no están preparados o un día difícil en el aula. Sin embargo, si tu hijo pretende estar enfermo demasiado seguido, podría haber un problema más serio detrás, como miedo a un conflicto inevitable con el acosador.
Acompañando a tus hijos podrás ayudarles a disfrutar de esta edad sin temor; habla con ellos y presta atención a las señales que podrían indicar un problema. Si sospechas que podría ser víctima de acoso, sigue estos consejos para protegerlo.
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