La tecnología parece haber avanzado significativamente desde que comenzó el nuevo siglo. En aquel entonces, muchos de nosotros teníamos equipos de escritorio robustos que parecían una caja, con una conexión a Internet extremadamente lenta si la comparamos a los estándares de hoy en día. Las redes sociales se encontraban todavía en una etapa inicial, la banca online no existía y nadie había oído hablar de aplicaciones móviles.

Al saltar rápidamente hasta el presente, nos encontramos con una imagen completamente diferente: el año 2015 es positivamente futurista para los estándares del año 2000. Los equipos de escritorio son elegantes, la banda ancha es súper rápida, las redes sociales se convirtieron en una parte intrínseca de la vida misma y existe una aplicación móvil para todo. Y, por supuesto, la banca online es un hecho.

Para muchos adultos, este cambio drástico se ha ido desarrollando en un segundo plano mientras seguían con sus ocupaciones cotidianas. Y aunque es muy posible que se hayan equipado con lo último en tecnología, su entendimiento del mundo digital no es tan amplio como quisieran: 20 por ciento de los adultos del Reino Unido, por ejemplo, carecen de los conocimientos básicos para manejarse online.

Esto constituye un problema, ya que los padres tratan de enseñarles a sus hijos una tecnología y una Internet de una época anterior: se sienten inseguros sobre qué deben hacer, hacia dónde deberían ir y cuál es la mejor manera de hacer frente a esta nueva realidad.

Como se destaca en una investigación reciente de ESET, aunque a la mayoría (88 por ciento) de madres y padres les preocupan las cosas a las que pueden acceder sus hijos online, muchos de ellos aún no tomaron medidas significativas necesarias para mejorar su seguridad.

Con esta idea en mente, trataremos de comenzar por el principio para ir llenando esos vacíos de conocimiento. Esta guía de introducción ofrece algunos consejos de seguridad que te harán pensar y te servirán de inspiración sobre la seguridad online. Nunca es demasiado tarde para aprender sobre este tema tan importante.

1. Familiarízate con Internet y las tecnologías relacionadas

Nadie espera que tengas los conocimientos y la experiencia para competir con estas mentes brillantes, todo lo contrario. No obstante, es importante saber de qué estás hablando para comprender las herramientas y los sitios web que son populares entre los niños de todas las edades, y para estar al tanto de los riesgos de las actividades online.

¿Por qué? Porque si no tienes ningún conocimiento básico sobre esta área, efectivamente no sabes nada acerca de las ventajas y desventajas de la tecnología y la web. Más allá de que leas sobre las señales de abuso online, aprendas sobre las amenazas que afectan a los gamers o te familiarices con las redes sociales que son tan populares entre adolescentes, cada granito de información hace su aporte.

2. Introduce la tecnología y la seguridad online lo más temprano posible

Algunos padres son cautelosos con la introducción de sus hijos a la tecnología e incluso a la web desde una edad temprana, pero mientras se haga de una manera controlada, puedes sentirte seguro de las cosas que tus hijos ven y hacen online.

David Harley, Investigador Senior de ESET, sugirió que esta importante tarea es tan vital que debería introducirse "incluso antes de que vayan a la guardería". Como explicó ya en 2013:

Aunque no soy partidario de darles a los bebés un acceso inmediato e ilimitado al mundo cibernético, es conveniente tratar de lograr una introducción gentil y guiada, motivándolos a probar cosas nuevas, a hacer preguntas y a entablar un diálogo constructivo.

3. No dejes de hablar sobre las redes sociales y la privacidad

Esta quizá sea una de las áreas más difíciles de manejar en términos de lograr un equilibrio entre usar las mejores prácticas y ser autoritario. Al fin y al cabo, a cada padre le corresponde averiguar cuáles son los límites con los que sus hijos se sienten cómodos y, en última instancia, ir improvisando a medida que ellos crecen.

Sin embargo, a lo largo de su desarrollo, es esencial que mantengas siempre "activas" las conversaciones sobre las redes sociales. Enfócate en el rol centralizado de estas redes en la vida moderna (para mantener el contacto, compartir y aprender), pero también aborda los peligros asociados, tales como el pedido de sexo online por extraños y la pedofilia online.

Además, recalca la importancia de la privacidad desde el punto de vista de la seguridad: en otras palabras, compartir con consciencia o ser "Share Aware", como dice la organización benéfica británica NSPCC. Explícales por qué compartir la información personal debe limitarse en las redes sociales, ya que estos datos se pueden copiar fácilmente y seguir compartiéndose, incluso después de que el usuario eliminó el post original.

4. Asegúrate de que todos tus dispositivos móviles estén seguros y protegidos

Antes, una familia promedio tenía un equipo y un solo punto de acceso estático para conectarse a Internet. Eso cambió radicalmente. De los smartphones a las tabletas, los equipos portátiles a las computadoras de escritorio y los televisores inteligentes a las consolas de juegos conectadas a Internet, ahora tenemos a nuestra disposición una enorme variedad de dispositivos portátiles con acceso a la web.

Teniendo en cuenta lo difícil y poco práctico que es mantener un control constante en los niños en todo momento, hay un problema aún mayor: que los padres logren sentirse seguros de que pueden supervisar la actividad online de sus hijos, incluso cuando están fuera de casa.

Con las aplicaciones móviles de control parental, por ejemplo, se soluciona este problema. Esta tecnología les permite a las madres y a los padres "proteger a sus hijos que usan smartphones y tabletas en esta era digital compleja", al mismo tiempo que los ayuda a controlar la factura telefónica impidiendo las compras integradas en aplicaciones móviles.

Lo que hace que este tipo de seguridad sea tan eficaz es su capacidad de adaptación: los padres pueden modificar la configuración según la edad de cada hijo, por dar un ejemplo. Juntos, tú y tus hijos pueden ponerse de acuerdo en la configuración más apropiada para ellos. Esto no solo los hace más responsables sino que también te permite sentirte cómodo con las libertades que les das.

La punta del iceberg

Esperamos que los 4 consejos de seguridad mencionados arriba te hayan dado más confianza, hagan que te comprometas a aprender y te entusiasmes con la seguridad en Internet, y te ayuden a ver lo importante que es la seguridad online para el bienestar de tus hijos.

Ésta es solo la punta del iceberg: hay muchísimas cosas más que puedes hacer para asegurarte de que tus niños aprendan con éxito a usar la tecnología e Internet.

De todas formas, con esta guía diste el primer paso y estableciste bases sólidas sobre las que puedes desarrollar tu comprensión de este tema tan importante. Día a día, el mundo se hace más digital... es imprescindible seguirle el paso.