Cientos y miles de documentos y correos electrónicos filtrados durante la intrusión a Sony Pictures a fines de 2014 fueron publicados en WikiLeaks, según reporta la BBC.
Se puede buscar entre los 170.000 emails y cerca de 200 archivos con un motor al estilo Google, informa The Guardian. Y es que si bien todo el material filtrado durante el ataque, que tal como les contamos, incluyó hasta películas que todavía no se habían estrenado, estuvo público todo este tiempo, WikiLeaks ha dado un paso en pos de facilitar la búsqueda para navegar por estos documentos.
La respuesta de Sony fue contundente: habló de un "acto criminal malicioso". Un vocero le dijo a a Sky News: "Los atacantes usaron la diseminación de información robada para tratar de dañar a Sony Pictures Entertainment y sus empleados, y ahora WikiLeaks, lamentablemente, los está ayudando en ese esfuerzo".
Además, sostuvo: "Estamos en total desacuerdo con la afirmación de WikiLeaks de que este material pertenece al dominio público y seguiremos luchando por la seguridad y privacidad de nuestra compañía y sus más de 6.000 empleados".
Julian Assange, editor en jefe de WikiLeaks, justificó la publicación diciendo que se trata de una muestra del funcionamiento interno de una compañía multinacional de interés público.
Este archivo muestra los comportamientos internos de una corporación multinacional influyente. Es noticioso y está en el centro de un conflicto geopolítico. Pertenece al dominio público. WikiLeaks se asegurará de que permanezca allí.
El ataque a Sony Pictures ocurrió en diciembre de 2014, y en consecuencia varias películas todavía no estrenadas se publicaron online, muchos empleados fueron amenazados y se expuso información sobre relaciones con celebridades. El FBI alertó sobre la utilización de "malware destructivo" y concluyó que Corea del Norte era responsable, como represalia por el film "The Interview", una comedia que representa el asesinato del líder del país, Kim Jong Un.
Como en cualquier incidente, es posible aprender lecciones del ataque a Sony para que, en el futuro, se puedan mitigar los riesgos.